Título: La Titanomaquia.
Autor: Eduardo García.
Año: 2020.
Capítulo: "La manzana de la discordia".
Capítulo anterior: "Pigmalión y Galatea".
Tienda: La Titanomaquia.
CAPÍTULO LX
"LA MANZANA DE LA DISCORDIA"
Zeus y su esposa, la temperamental Hera son los padres del dios de la guerra, Ares, pero también lo son de Eris, la diosa de la discordia, que es mucho menos conocida que su hermano, aunque estos solían formar equipo para provocar las guerras más catastróficas entre los dioses y entre los hombres, siempre por su insaciable hambre de sangre, era ella quien creaba conflictos que daban origen a las guerras que lideraba Ares.
Ninguno de los dos dioses eran queridos ni aceptados por los demás, eran demasiado conflictivos y brutos, en el Olimpo se celebró una gran boda, Peleo y Nereida contraerían nupcias y para ello, invitaron a la mayoría de los dioses, pero hubo una excepción, Eris no fue invitada al banquete.
Pese a ello, la diosa de la discordia sí se hizo presente en el Olimpo entró al salón volando ante la mirada estupefacta de todos los dioses, Eris dejó caer una manzana dorada con la leyenda “para la más hermosa”, en la mesa estaban las diosas Hera, Atenea y Afrodita, todas ellas se consideraban la más bella, y por tanto, creían que la manzana les pertenecía.
Eris había creado un conflicto más, las tres diosas peleaban por el título de la más hermosa del Olimpo, mismo que, por derecho, le pertenecía a la diosa del amor, Zeus tendría que elegir a quién le pertenecía la manzana, pero el dios no fue capaz de elegir y permitió que fuera un mortal el que lo decidiera.
Hermes condujo a las tres diosas que se presentaron ante el príncipe Paris de la ciudad de Troya para que decidiera cuál de las tres era la más bella, Atenea le prometió al príncipe que si la elegía, sería invencible y ganaría cualquier guerra contra cualquier rival y contra cualquier adversidad, Afrodita le ofreció a la mujer más bella del mundo y Hera le propuso ser el gobernante de todos los hombres, el joven príncipe se dejó convencer por Afrodita y la eligió, Atenea y Hera se ofendieron y le juraron venganza al príncipe que tenía ahora a su lado a la bella Helena, hija de Zeus.
La venganza de las diosas sí se consumó y provocó una de las guerras más famosas de todos los tiempos, la guerra de Troya que cobró un sinfín de vidas, llenando el Inframundo de almas para el deleite de Ares y Eris, esta última se unió con el titán Éter y con él engendró a más de una docena de demonios, todos malvados por naturaleza, la personificación de todos aquellos males que liberó Pandora con su caja como el hambre, la enfermedad, la avaricia, codicia, envidia y otros males más que hasta la actualidad y hasta el fin de los tiempos, torturarán a la humanidad.
Comentarios
Publicar un comentario