Ir al contenido principal

La Titanomaquia | Capítulo XXXIII

   Título: La Titanomaquia.

Autor: Eduardo García.

Año: 2020.

Capítulo: "De Grecia a Egipto".

Capítulo anterior: "Desafío musical".

Tienda: La Titanomaquia.

CAPÍTULO XXXIII

"DE GRECIA A EGIPTO"

La joven Ío era una ninfa residente en el reino de Argos, el mismo en donde Zeus se había convertido en un toro para raptar a la princesa Europa, ahora, el dios había puesto la mirada en la joven que era sacerdotisa de la propia esposa de su acosador, la diosa Hera.

Mediante los sueños, Zeus, acosaba a la doncella para intentar persuadirla de entregarle su virginidad en el lago de Lerna, los sueños se hicieron tan constantes que decidió contárselos a su padre, Ínaco fue a consultar a un oráculo, las sacerdotisas le aconsejaron que echara a Ío de su casa para que el iracundo dios no les castigara con uno de sus rayos.

Ío no tuvo de otra más que abandonar su casa, comenzó a vagar por los bosques aledaños y, cuando estaba completamente indefensa, el dios se apareció y la hizo suya una y otra vez, cuando Ínaco no soportó más los remordimientos por haber abandonado a su propia hija, mandó a que la buscasen por toda la región, pero ya era tarde, Zeus ya se había saciado. 

Hera sospechaba de las andanzas de su marido, aunque acostumbrada, estallaba en cólera cuando descubría los engaños, la diosa bajó del Olimpo, para evitar que su esposa descubriera lo que había hecho, Zeus convirtió a su amante en una vaca común y corriente.

Con la astucia que le caracteriza, Hera le pidió a Zeus que le regalara la vaca, aunque no queriendo, el dios aceptó para no levantar aún más sospechas, la diosa se la llevó y le encargó su custodia al gigante Argos, éste la habría de vigilar con sus cien ojos durante toda su vida, solamente dos de ellos dormían a la vez, el resto estaban despiertos, por lo que, el gigante jamás despejaría la mirada de la vaca.

Zeus no se quedó con los brazos cruzados, le encargó a su hijo Hermes que le ayudara a rescatar a su amante, sabiendo de las habilidades innatas del dios para mentir y engañar, éste se disfrazó de un campesino y, comenzó a tocar su flauta de un modo que el sueño invadió al gigante por completo, su centena de ojos se cerraron y durmieron, momento que aprovechó Hermes para desenvainar su espada y degollar al gigante Argos, acto seguido, se llevó la vaca para entregársela a su padre.

Hera vio todo, estaba realmente furiosa pues, era evidente que se trataba de una infidelidad más de su esposo, fue hasta donde estaba el cadáver del gigante y le quitó todos sus ojos, usándolos para adornar las plumas de su animal favorito, el pavorreal. 

Para vengarse, Hera ató a los cuernos de la vaca un tábano que le picaba la espalda sin descanso alguno, el animal corrió y corrió por todo el mundo conocido hasta entonces, pasando por varios lugares como el mar Jónico, Iliria y el Cáucaso, en donde se encontró al titán Prometeo, cuyo hígado estaba siendo devorado por el águila Etón, su travesía terminó en la tierra de los faraones y las grandes pirámides, Egipto, ahí pudo recobrar su forma original y dio a luz a Épafo a las orillas del río Nilo.

Los curetes, por órdenes de Hera, robaron al hijo de la amante de su marido y se lo entregaron, la diosa lo escondió, Ío comenzó otra travesía, ahora para buscar a su hijo, tomando la misma ruta inicial, Zeus estaba enfurecido y aniquiló sanguinariamente a los que habían robado a su hijo, el martirio de la ninfa terminó en el Medio Oriente, ahí lo había escondido Hera, estaba siendo amamantado por la reina Astarté de Biblos.

La ninfa aclaró la situación con la reina y esta le entregó a Épafo, y regresaron juntos a Egipto, la ninfa no quería regresar a Grecia en donde sería castigada una y otra vez por Hera, así que, decidió quedarse a vivir en la tierra de los faraones, su hijo se convirtió en un aclamado rey y fundador de ciudades, y su madre fue venerada como la diosa Isis en la mitología egipcia.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Anuncio.

  Por: Eduardo García. Gracias a un convenio alcanzado entre Libros Atlántida e HiperCentro, nuestros títulos estarán a tu disposición completamente gratis por un mes, mismo que servirá como prueba, si se obtienen buenos números, permanecerán gratuitos, de otra manera, continuarán vendiéndose en la tienda de Amazon. Los libros "La Titanomaquia", "Los Pilares de Heracles" y "Hércules" estarán disponibles de manera gratuita a través de este mismo blog, cada capítulo se habrá de publicar en distintos artículos de manera secuencial, mismos que incluirán anuncios para el sustento del sitio. Deseamos que esta alianza les sea provechosa a ustedes, lectores, y que disfruten de las obras que, con mucho esfuerzo, dedicación y placer, hemos redactado para ustedes. Redes sociales: HiperCentro en Twitter. Libros Atlántida en Twitter.

El origen del término "Arácnido".

  Muchas palabras usadas en el español y otras lenguas tienen su origen en la Antigua Grecia, el término "Arácnido" es uno de ellos, que se tomó del mito de Aracne y su batalla contra la diosa Atenea ¿quieres saber qué sucedió? Muy pronto lo sabrás en La Titanomaquia, próximo a la venta en Amazon Kindle. ¿Sabías que...? El término "arácnido" se deriva de 'Aracne' la protagonista de uno de los mitos más famosos por su épica batalla contra Atenea. Este y muchoa más mitos en La Titanomaquia, muy pronto a la venta en @AmazonKindle pic.twitter.com/IvwqCDn2Hw — LaTitanomaquia (@LTitanomaquia) October 22, 2020 LA TITANOMAQUIA MUY PRONTO EN AMAZON KINDLE   ENTRADAS ANTERIORES: LA REPARTICIÓN DEL MUNDO ¿QUÉ ES LA TITANOMAQUIA?

Detrás del personaje| Zeus.

  Por: Eduardo García. En 'La Titanomaquia' tenemos, como personaje principal, al dios griego más importante de la antigüedad, nos referirmos a Zeus, aquel que peleó contra su padre, Cronos, para dar comienzo así, a la batalla entre titanes y dioses olímpicos, conocida como la titanomaquia, una guerra de proporciones meramente apocalípticas. Zeus es conocido por ser padre de casi todos los demás personajes de la mitología griega, no importándole que sus amantes fueran sus propias hijas, el dios del rayo era un perfecto infiel, siempre tenía amoríos a escondidas de su esposa, la diosa Hera, quien, furiosa, tramaba venganzas contra sus rivales e hijos. Zeus era temperamental e increíblemente poderoso, junto con su esposa, conformaban la pareja más poderosa de todo el Olimpo, aunque indigada, Hera no podía castigar a su esposo por sus infidelidades, pero no así a las amantes, a menos que, las amantes también fueran diosas. En la mitología griega hay decenas de mitos que tienen com...